Relaciones

Contar cosas que nos pasan, que nos suceden en nuestro vivir diario, que escuchas sin querer, sin prestar atención, pero que poco a poco, vas entrando en la conversación y ya tus oídos y todo tú ser está pendiente, quieres saber, entender…

              Me encontraba desayunando en el Paseo Marítimo, había salido a dar un paseo con la bici, en plan relax, sentado mirando al mar, a mi derecha escucho una conversación de tres chicas jóvenes, bueno jóvenes de treinta y tantos, o eso creo, a mi desde luego me parecen jóvenes, iban en plan informal, de mañana, estaban desayunando también, solo hablaba una de ellas, las otras solo asentían o preguntaban, la conversación era relajada, sin levantar mucho la voz y sin entonaciones raras, si como lo que contara fuera normal.

              Voy al grano, que me voy por los cerros de Úbeda, la que llevaba la voz cantante empezó a decir que, su novio llevaba varios días sin llamarla, que no sabía porque, pero que pensaba que habían roto. Tampoco sabía decir el porqué, pero que lo daba por hecho, también  puede ser que  cuando empecé a escuchar ya lo hubiera contado.

              Pero ahí no queda la cosa, la misma chica en una salida coincide al azar con su novio, que ya no era su novio o eso creía ella y este se le acerca, pero ella había salido con unas amigas y algún amigo. Ella  estaba hablando con otros y el novio estuvo un rato con ellos y parece ser que  se mosqueo, por que cuando quiso darse cuenta había desaparecido. Le contaba a las amigas, por lo que deduje, que el exnovio le seguía gustando y que no se fue con él, por no dejar a las amigas tiradas. Y que seguramente el novio se fue porque ella no le hizo caso. Qué cosas más raras pasan en el amor, a ella le gusta el novio, no le hace caso porque ha venido con otros amigos, querría darle celos o una pequeña lección, en fin, la vida…

              Seguimos, yo desconecto porque sigo desayunando y en otro momento  de la conversación dice que otro amigo que conoce de la infancia, que coincidieron en casa de otro amigo, que estuvieron un buen rato contándose cosas de su vida pasada, y que le gusto mucho. Que quedaron para dar una vuelta en la moto y que ya habían pasado alguna semana y no lo había llamado, se extrañaba.

              Y sigue contando más cosas, de otro día que iba con su novio o su exnovio y vio a otro chico que también le gustaba y se puso a hablar con él y se ve que quedaron y que estaba apurada porque el novio estaba pendiente de la conversación. Quizás esa fue la causa del enfado del novio. ¿Quién sabe? Pero, que son especulaciones. Todo era la vida de una, y quién lo contaba era ella, no me quede más rato y no sé si las otras llevaban una vida social tan liosa, en cuanto a amores y conquistas. Y  eso en lo que se tarda en desayunar, que si fuera una comida. Lo que más me llamo la atención fue su naturalidad, lo contaba sin sentimiento, como si fuera algo normal, ni enfadada, ni contenta, como si la historia no fuera con ella. Lo más natural es que estuviera enfadada con su novio, porque no la llamaba y había roto con ella o eso creía.

              Por lo que escuche, los tiempos cambian, ahora son ellas quien llevan la voz cantante en el las relaciones, perdón, siempre lo han llevado pero ahora lo dicen sin tapujos, con toda naturalidad como tiene que ser, siempre he creído que las que ligan son ellas, que nos creemos nosotros que ligamos algo, que equivocados que estamos, ligamos lo que nos dejan y me refiero a los hombres en general.