Esta mañana me he levantado dándole vuelta a la frase “la felicidad está sobrevalorada”, ya lo había escuchado, esto viene de otra conversación que tuve, de qué, la felicidad es más bien un concepto abstracto, nos empeñamos en intentar alcanzarla y claro está, no lo conseguimos o solo conseguimos pequeños momentos.
Pero, ¿qué es la felicidad?, ¿un estado continuo de alegría?, ¿un estar contento que se prolonga en el tiempo? Todos de alguna forma anhelamos o queremos ser felices y quién diga lo contrario miente como un bellaco. Creo que hay momentos felices e infelices y que ambos forman parte de la felicidad, que sería la felicidad sin su parte contraria, no existiría.
Ya he mencionado en alguna ocasión, la novela, “Un mundo feliz” de Aldous Huxley, donde todos eran felices, se les daba su ración de “soma”, la droga de la felicidad, el mana de la vida, pero claro, había un problema, algunas personas se preguntaban por el sentido de la vida, tiene que haber algo más.
Qué pregunta, ¿el sentido de la vida es ser feliz?, o mejor, ¿hacer que otros sean felices?, ¿qué produce más felicidad, mi propia felicidad o la de los demás?, sigo en esa búsqueda, otros buscan el arca perdido, o la sangre de Cristo y yo la felicidad…
Hay otra palabra o concepto que me gusta y que mueve el mundo, la ilusión, cuando hacemos las cosas con ilusión, el mundo se para, el reloj del tiempo se detiene y solo estamos nosotros, ilusionarse, qué bonito.
Las ilusiones y los sueños, son la cuerda que tira del mundo, que hace que esto funcione, sin embargo, tiene un pero, ¿querer ser feliz en un futuro?, solo puedo ser feliz en este momento presente, ahora mismo, en lo que estoy escribiendo, en la libertad de escribir, de expresarme, de decir, de hablaros letras pensadas, que se traducen en las palabras escritas.
Tener un propósito de vida, viviendo el presente, como si no hubiera un mañana y menos un futuro. A veces, mi felicidad no depende de mí, depende de la felicidad de los demás. Conclusión: Vive y deja vivir, y que tú vivir sea vida para los demás.
Nuestro egoísmo, es nuestro gran problema, hace que no podamos ser felices, queremos más de lo que tenemos, no estamos conformes con nada, anhelamos otras cosas, ese saco que no tiene fondo, que se ha roto, el ego nos hace inconformista, que de alguna forma nos da vida, pero nos hace infelices.
“No es más feliz, él que más tiene, sino el que menos necesita” Ese querer sin límites, siempre quieres eso que no tienes, quiere lo que tienes y sé feliz.
Hay una canción de Sabina que me lleva tiempo resonando en la cabeza, que no me la puedo quitar, “Oiga Doctor”
Oiga, doctor
Devuélvame mi depresión
¿No ve que los amigos se apartan de mí?
Dicen que no se puede consentir
Esa sonrisa idiota…
La melancolía, estados tristes a veces sin motivos, sin embargo tienen un motivo, hacernos preguntas y plantearnos cosas, reflexionar, saber que la vida no es un estado continuo de felicidad, que la amargura también es vida, es estar vivo, tener sentimientos, preocuparnos… Si tenemos esa sonrisa idiota, vivimos alejados del ruido de la vida, no comprendemos el sufrimiento, no sabemos lo que es la pena, uffff… territorio prohibido, ya tenemos las cosas mal, con el dichoso coronavirus y lo rebrotes, para que me ponga tristón.
Dejo el enlace de la canción, merece la pena escucharla y prestarle atención a la letra, tiene su punto, espero que os guste…
voy a sonar muy aburrida , pero no puedo pasar si dejar el comentario, ya que sigo enganchada con el tema de felicidad: yo creo — y es solo mi opinión 🙂 – que la felicidad es una sensación subjetiva de bienestar general como reflejo de la saludo mental. dentro de este esatdo podemos tener momentos de tristeza, alegaría, aburrimiento, pero la base es esta sensación cuando sabes que vale la pena vivir y quieresa saber qué vendrá mañana. algo así 🙂
Siii…para mi la felicidad es la suma de esos momentos e intentar ser feliz con lo q hacemos …hacer las cosas con esa ilusión, nos hace felices…la vida es así …